En las últimas dos semanas decomisaron más de 5.000 kilos de carne, proveniente de faenas ilegales o sin las condiciones sanitarias adecuadas.
La Policía de Entre Ríos, a través de la Dirección Prevención de Delitos Rurales, elaboró un informe que da cuenta de la gran cantidad de carne de origen clandestino que se consume en la provincia. Según este informe, “gran porcentaje” de la carne que se consume proviene de faenas realizadas sin las condiciones sanitarias adecuadas o directamente de la actividad de “cuatreros” que ingresan al mercado cortes provenientes del abigeato.
Se indicó que continúan los operativos diagramados con la implementación del Plan Integral de Seguridad en el ámbito del territorio entrerriano, tendientes a prevenir los hechos delictivos en zonas rurales, como asimismo hacer el contralor de las disposiciones legales vigentes en caza, pesca, carne y Código Alimentario Nacional.
Se explicó que se planifican procedimientos sorpresas, itinerantes y sincronizados que han permitido demostrar la “desconsideración hacia la fauna silvestre”, la depredación a través de la caza de especies vedadas o en vías de extinción y de la pesca indiscriminada donde no se respeta los tamaños establecidos por la Dirección Recursos Naturales. “Esta nueva operatividad ha dejado en claro que gran porcentaje de la carne que se consume en nuestra comunidad es de origen clandestino, ya sea por la faena de campo sin las condiciones sanitarias que evitan posibles enfermedades en la salud humana, ya que son carneadas fuera de un establecimiento habilitado para tal fin, o en el peor de los casos la proveniente de los cuatreros que a través de su actividad delictiva ingresan en el mercado en negro cortes cárnicos totalmente expuestos a riesgos graves contra la salud ciudadana”, indicaron desde la Policía Rural. Agregaron que “más allá del perjuicio económico que le originan al productor ganadero” esta actividad beneficia “solo a comerciantes inescrupulosos que facilitan este negocio ilegal”.
Estas consideraciones surgieron del análisis permanente que se efectúa de los innumerables secuestros y decomisos que se producen a diario, como los ocurridos en estos últimos días, donde se incautaron más de cinco toneladas de carne vacuna, porcina, aviar y pescado de origen clandestino o carente de condiciones sanitarias. Casi la totalidad se encuentra en estado de descomposición y no apto para el consumo humano.
Fuente: Diario UNO
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