viernes, 8 de agosto de 2014

La impresión 3D de alimentos mejorará la nutrición de la tercera edad

La impresión 3D encuentra una novedosa aplicación en el ámbito de la alimentación específica para las personas mayores con problemas de masticación. Esta tecnología será aprovechada por la iniciativa europea Performance para la producción y distribución de comidas con texturas y nutrientes adecuados para los ancianos que sufren este problema.

Un consorcio formado por 14 empresas crea Performance, un proyecto que tiene como objetivo desarrollar nutrición personalizada para aquellas personas de edad avanzada que tienen problemas para masticar y tragar los alimentos.
Para muchas personas mayores un acto tan básico como consumir alimentos puede ser un reto diario debido a problemas de salud que les impiden masticar y tragar correctamente. Por ello, nace Performance, una iniciativa a través de la cual se pretende desarrollar una sistema de elaboración alimentaria automatizada, rápida y personalizada para ancianos con problemas de masticación a través de la tecnología de impresión 3D.
Este avance aplicado al mundo de la alimentación permite crear a partir de alimentos naturales triturados platos con texturas más apetecibles y saludables, con las vitaminas y nutrientes adecuados para cada persona, tanto aquellos que viven en residencias para la tercera edad como para aquellos que viven en su hogar.
Esta iniciativa, en la que participan empresas de cinco países europeos (Alemania, Dinamarca, Países Bajos, Italia y Austria) pretende involucrar a toda la cadena de suministro, comenzando desde el productor hasta el lugar de consumo, ya sea la residencia o el hogar. El ciclo comenzaría con el consumidor final, que indicará cuáles son sus preferencias culinarias y necesidades nutricionales. Una vez registrada esta información ,un productor local procesará el alimento a través de la impresión de comida en 3D y elaborará el plato. Finalmente, será empaquetado, etiquetado con los datos de la persona a la que se dirige y congelado, para su posterior distribución. El resultado final es un plato de aspecto similar al de una comida tradicional, pero con la textura de un puré y los valores nutricionales necesarios para las personas mayores.
El proyecto, en el que se han invertido 3 millones de euros, es una colaboración multidisciplinar entre empresas de alimentación e ingredientes, organizaciones tecnológicas, desarrolladores de software, compañías de catering, proveedores de alimentos y envases, instituciones y residencias para la tercera edad.

Fuente: Profesional Retail

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